A. Origen y evolución histórica
Durante la primera guerra mundial, muchas sociedades nacionales llegaron
a extenderse considerablemente a causa de las ingentes necesidades comprobadas.
Una vez restablecida la Paz no desaparecieron los sufrimientos, en extensas
zonas de Europa azotes devastadores hicieron grandes estragos, epidemias,
éxodos de población, refugiados, apátridas menesterosos,
etc. Las Sociedades Nacionales que estaban bien organizadas y tenían
experiencia en actividades en tiempos de guerra, continuaron, por el impulso
adquirido, organizando grandes acciones internacionales en favor de las
personas hambrientas o desplazadas, especialmente en Europa Oriental. En
esa época, muy pocos países tenían Ministerios de
Sanidad, y aún no había muchas organizaciones internacionales
que pudieran coordinar acciones de socorro de envergadura.
Es así que, una vez finalizada la segunda guerra mundial, las
Sociedades Nacionales amplían el campo de sus actividades, y de
la fundación de una de ellas, la Sociedad de Naciones, nace un creciente
desarrollo del Movimiento de la Cruz Roja, así, en 1919, unos de
sus dirigentes de la Cruz Roja norteamericana, H.P. Davison propone, confederar
en una organización comparable a la Sociedad de Naciones, a las
Sociedades Nacionales de la Cruz Roja de los diferentes países a
fin de realizar una cruzada universal y permanente que tenga como fines:
mejorar la salud, evitar las enfermedades y atenuar el sufrimiento. En
1939 se establece definitivamente en Ginebra la Liga de Sociedades de la
Cruz Roja.